(Re) Elecciones Griegas: ¿Otra mayoría absoluta para la derecha?
El pasado 21 de mayo, cerca de 10 millones de griegos fueron llamados a las urnas para renovar los 300 escaños del Parlamento de la República Helena. El resultado fue una clara y sorpresiva victoria para el partido oficialista, Nueva Democracia. En base a esto, el Primer Ministro, Kyriakos Mitsotakis, anunció la celebración de nuevas elecciones, programadas para el 25 de junio, donde espera recuperar la mayoría absoluta, gracias al reinstaurado sistema de bonus por mayoría. ¿Cuál es este sistema? ¿Qué va a pasar?
Al final, el conservador Nueva Democracia (ND) consiguió un notable triunfo, recibiendo el 40.79% de los votos y 146 escaños, quedándose a 5 escaños de los 151 necesarios para contar con una mayoría absoluta. En segundo lugar, se ubicó la populista Coalición de Izquierda Radical - Alianza Progresista (Syriza), con un 20.07% del voto y 86 escaños. En tercera posición, con un resultado sorpresivo, se ubicó el socialdemócrata PASOK - KINAL (PASOK), quien obtuvo el 11.46% de los votos y 41 escaños. Por último, en cuarto y quinto lugar se ubicaron el Partido Comunista de Grecia (KKE), el cual se consolidó con 26 parlamentarios; y el ultraderechista Solución Griega (EL), con 16 sitios.
La elección marcó un durísimo revés para el principal partido de oposición, Syriza, pues las encuestas, a pesar de otorgarles la segunda posición, abrían la posibilidad de consolidar un frente de izquierda progresista entre Syriza, PASOK y meRA25, con el apoyo externo del KKE, el cual podía arrebatarle el gobierno a ND y marcar el regreso de Alex Tsipras a la Mansión Máximos, la cual fue su residencia durante su periodo como Primer Ministro entre 2015 y 2019. Debido al desastroso resultado, muchas voces llamaban a la dimisión de Tsipras; sin embargo, al final, decidió mantenerse como líder del partido.
Otra de las sorpresas de la noche fue el resultado de PASOK, quien fuera el partido hegemónico de izquierda, antes de la llegada de Syriza. El resultado de estas elecciones marcó su mejor resultado desde los comicios de 2012, abriendo la conversación acerca de una supuesta "recuperación" del partido y un posterior repunte en las siguientes Elecciones Generales, desplazando a Syriza como principal partido sólido de oposición.
Del mismo modo, los resultados lograron la consolidación del partido oficialista, Nueva Democracia, como el preferido por los griegos, al mejorar su resultado en el voto popular por casi 1%, comparado a las elecciones del 2019, a pesar de contar con diversos escándalos durante la administración de Mitsotakis. Asimismo, se pudo observar otro error de las encuestas alrededor del mundo, mostrando la existencia de "voto oculto" para ND o votantes indecisos que se inclinaron por mantener el actual status quo.
Siguiendo los resultados, el Primer Ministro, Kyriakos Mitsotakis, rechazó la idea de formar una coalición con la ultraderecha, así como también la construcción de un gran pacto entre Nueva Democracia y PASOK. En su lugar, manifestó que, tras haber tenido un mejor resultado que en los sufragios de 2019 y haber desafiado las predicciones de las principales encuestadoras, era claro que el pueblo griego aprobaba su gobierno y, por ende, hacía el llamado para nuevas elecciones, a celebrarse el 25 de junio, donde se mantiene confiado en que el electorado heleno le otorgará la mayoría absoluta. Sin embargo, ¿Cuál es el factor principal detrás de esta decisión? La respuesta es el sistema de bonus por mayoría.
El sistema de bonus por mayoría se encontró presente en todas las elecciones griegas desde 1974, hasta que, en 2016, el gobierno liderado por Alex Tsipras y la coalición Syriza - ANEL, abolió este sistema y lo reemplazó por un sistema proporcional con una valla electoral del 3%, siendo estas últimas elecciones las primeras celebradas bajo este nuevo sistema. Sin embargo, en enero de 2020, el actual gobierno de Nueva Democracia reinstauró el sistema de bonus por mayoría, el cual va a volver a ser aplicado en las elecciones del presente mes.
Este consiste en que, el partido político que quede en primer lugar con un mínimo del 25% de los votos válidos, recibirá un bonus de 20 escaños extras, con 1 escaño más por cada 0.5% del voto, pudiendo llegar a recibir hasta 50 sitios más en el parlamento, en caso el partido que obtenga el primer lugar reciba el 40% de los votos. Cabe resaltar que, luego de que se atribuyen los escaños por bonus, el sistema proporcional se aplica para los escaños restantes.
De la misma manera, de acuerdo a una ley de 2019, los griegos viviendo en el extranjero van a poder ejercer su derecho al voto en estas votaciones, siempre y cuando hayan vivido en Grecia por un mínimo de 2 años en los últimos 35, así como también es un requisito que hayan pagado impuestos en el país en el año de la elección o en el anterior a esta.
En referencia al sistema de bonus por mayoría, Kyriakos Mitsotakis se muestra confiado en que Nueva Democracia logrará el bonus de 50 escaños, pues su partido logró casi el 41% de los votos válidos en las elecciones de mayo, lo cual les habría garantizado una mayoría absoluta en la Asamblea, por lo que el Primer Ministro considera que esta elección va a ser una victoria "fácil".
Cabe preguntarse, ¿existe la posibilidad de que Nueva Democracia pierda estas elecciones y no reciba la mayoría absoluta, incluso con el sistema de bonus? La respuesta es no y, a pesar de que el panorama puede complicarse para Nueva Democracia (de contar con nuevos escándalos), las chances para la izquierda son prácticamente nulas.
En el panorama de la izquierda, se ha producido una creciente y notoria división ideológica y electoral, con Syriza, el partido izquierdista más consolidado en los últimos 10 años, perdiendo casi el 12% del apoyo popular comparado con la anterior elección, mientras que PASOK recupera cada vez más el apoyo que tenía antes de su colapso partidario y el KKE se consolida como la alternativa fuerte para la izquierda tradicional.
Esta suerte de "rotura" en el campo izquierdista griego ha afectado la repartición de escaños, pues, al no tener un partido consolidado en este espectro ideológico, a diferencia de la derecha con Nueva Democracia, se hace cada vez más difícil el poder formar un bloque o coalición de gobierno de izquierdas. Asimismo, la presencia del KKE, el cual no solo es socialmente conservador, sino también pro - ruso, rompe casi todas las posibilidades de esta unidad, pues muchos dirigentes de este partido prefieren la continuación de ND antes que un gobierno progresista.
Por el lado de la derecha, la fortaleza de Nueva Democracia se encuentra más presente que nunca, al no contar con una competencia seria en su propio espectro ideológico, puesto que el único partido de ultraderecha que podría ser competitivo se encuentra luchando por superar la valla electoral. En virtud de esto, ND no tiene por qué preocuparse por la necesidad de formar una coalición con la ultraderecha o por los posibles ataques de partidos de la izquierda sobre este tópico, a diferencia de muchos partidos políticos de derecha alrededor de Europa, como el Partido Popular con VOX, en España.
De acuerdo a las encuestas, Nueva Democracia mantiene un apoyo superior al 40% logrado el 21 de mayo, situándose casi en un 44% de apoyo popular, con el que obtendrían, de manera certera, el bonus de 50 escaños, la mayoría absoluta y una aplastante victoria electoral. Respecto al segundo lugar, Syriza y PASOK luchan por su consolidación en este, siendo la diferencia que los separa menor al 10% de intención de voto.
En cuanto a la repartición de sitios en el parlamento, empleando el sistema de bonus, la encuestadora "Metron Analysis Mega" predice un parlamento con Nueva Democracia teniendo 162 escaños (11 más de los necesarios para la absoluta), Syriza con 51, PASOK con 32, KKE con 20, PE con 13, EL con 12 y NIKI con 10, representando 162 escaños para el bloque de derecha, 95 para el de izquierda, 22 para el de ultraderecha y 20 para el de ultraizquierda.
La victoria de Kyriakos Mitsotakis se encuentra casi asegurada. Tras perder dos elecciones en 2015, Mitsotakis, líder partidario desde 2016, supo conducir a Nueva Democracia a una victoria en 2019, otra en mayo de este año y muy probablemente una tercera en este mes, por lo que la derecha griega ve con buenos ojos su continuación en el cargo y considera que es la opción más sensata. Por otra parte, con una izquierda debilitada y una antigua centro izquierda hegemónica con posibilidades de competir con ella por un segundo lugar, muchos hablan de hecatombe electoral para este sector ideológico, con un poco de pesimismo permitido. Independientemente de los resultados, las voces de los habitantes de la cuna de la democracia se encuentran a días de ser escuchadas.