Andorra: Amplio triunfo del oficialismo
Por Felipe Galli
El domingo 2 de abril se realizaron las elecciones generales en el Principado de Andorra, con el objetivo de renovar los 28 escaños del Consejo General, el cual tendría a su cargo la formación de un nuevo gobierno. Al final, el partido de centroderecha gobernante desde 2011, Demócratas por Andorra (DA), sale como el gran ganador al recapturar, con 16 escaños, la mayoría absoluta que perdió en 2019 y garantizar la reelección de Xavier Espot Zamora como presidente del Gobierno. Todo esto a pesar de haber obtenido apenas un 32% de los votos. ¿Qué ocurrió?
La política de este minúsculo estado de habla catalana, enclavado entre Francia y España y con apenas 81 mil habitantes, es bastante interesante. El presidente de Francia y el obispo católico de la localidad española de Urgell ejercen ex officio la jefatura de Estado como "copríncipes" de Andorra. Mientras tanto, el país cuenta con esta legislatura electa elegida por un sistema mixto: catorce consejeros elegidos de a dos en siete circunscripciones, en las cuales la lista más votada se queda con las dos bancas; y otros catorce elegidos por representación proporcional a nivel nacional. El Consejo General elige al presidente del Gobierno, el cual dirige el gabinete.
De los 81 mil habitantes, solo unos 29 mil, algo más del 36%, estaban llamados a las urnas este domingo debido a las dificultades que implica adquirir la ciudadanía andorrana y la elevada cantidad de residentes extranjeros. Andorra es un paraíso para la gente adinerada por sus bellos paisajes turísticos, su altísimo nivel de seguridad interna y su laxitud en términos tributarios. Aunque no es miembro de la Unión Europea, mantiene estrechos vínculos con ella.
La campaña estuvo signada por el inminente acuerdo entre Andorra y la Unión Europea, similar a los firmados recientemente con otros microestados, como San Marino y Mónaco, así como por el debate sobre la despenalización del aborto. Las fuerzas de centroizquierda en general apoyaron la legalización de esta práctica en el país (hoy un delito penado con cárcel), mientras que la centroderecha y los partidos centristas se debatieron entre quienes rechazan de plano el debate y quienes buscan, por el momento, la descriminalización.
Aunque se trata de un debate sobre un tema social, terminó agitando las instituciones del país. El copríncipe español Joan-Enric Vives, obispo de Urgell, anticipó varias veces en el pasado que abdicaría al coprincipado sin renunciar al obispado si el Consejo General aprueba la legalización el aborto (toda legislación necesita el asentimiento formal de los copríncipes para entrar en vigor, aún tratándose de una mera formalidad). Si esto ocurriera, se desataría una crisis que podría poner en duda el modelo de Estado andorrano, vigente desde hace más de ochocientos años. No se ha discutido la posibilidad de que Andorra se convierta en república.
¿Quiénes compitieron?
El partido Demócratas por Andorra (DA), de centroderecha, llegó al poder en el año 2011 bajo el liderazgo de Antoni Martí, que se retiró en 2019 después de que el partido perdiera su mayoría parlamentaria. Le sucedió Xavier Espot, también de DA, luego de conformar una coalición con los partidos Liberales de Andorra (L'A) y Ciudadanos Comprometidos (CC), con este último mantiene también una alianza electoral. L'A se dividió cuando los cuatro diputados que el partido obtuvo en 2019 abandonaron la formación para fundar un nuevo partido, Acció, que se mantuvo en el gobierno.
El principal retador de DA era, hasta ayer, el Partido Socialdemócrata (PS), que concurrió a estas elecciones en alianza con otro progresista más pequeño, Socialdemocracia y Progreso (SDP). El frente PS-SDP puso fin a una histórica división de la centroizquierda andorrana que había perjudicado sus chances en 2015 y 2019. Sin embargo, no contaban con la irrupción de un nuevo partido que captó el voto opositor, Concòrdia. Este partido, si bien se describió públicamente como progresista y ambientalista, podría calificarse más como una fuerza catch-all que supo atraer a varios tipos de votantes.
El último partido a citar es Andorra Endavant (Andorra Adelante). Se trata de una nueva formación, fundada por la diputada Carine Montaner Raynaud, de tendencia conservadora, populista y euroescéptica (aunque no tan a la derecha como las formaciones de discurso similar en el continente).
Los resultados
Así, con el voto progresista dividido entre la lista PS-SDP y Concòrdia, el bloque DA-CC logró el 32.7% de los votos y una mayoría absoluta de 16 escaños. Concòrdia logró un inesperado segundo puesto, con algo más del 21.4% de los votos y 5 escaños, mientras que el bloque PS-SDP sufrió un duro revés con un 21.1%, viéndose relegado al tercer puesto, obteniendo el peor resultado de su historia. Se queda con solo 3 escaños. El cuarto lugar se lo llevó Andorra Endavant, que logró el 16% de los votos y 3 escaños.
La lista DA-CC se benefició de triunfos ajustados en los distritos parroquiales, llegando a ganar cuatro de las siete parroquias (Andorra La Vella, Escaldes-Engordany, Encamp y La Massana) y triunfando sin oposición en una quinta (Canillo). El resultado parroquial fue favorable a los nuevos partidos: Concòrdia ganó en Sant Julià de Lòria y Acció en Ordino, logrando su único escaño gracias a un pacto con DA. Este resultado dejó a L'A como el único de los seis partidos que disputaron la elección sin representación parlamentaria.
Espot celebró la victoria "holgada y amplia" de su partido y se comprometió a trabajar "incansablemente" con la nueva mayoría absoluta. Por su parte Cerni Escalé, líder de Concòrdia y a partir de ahora flamante líder de la oposición andorrana, afirmó haberse quedado "sin palabras" por un resultado que se consideraba improbable. En contraste, el líder del PS, Pere López, anunció que su partido entraría en un período de reflexión, sin anticipar si renunciará o no al liderazgo.